La Guardia Civil reforzará su plantilla en la Costa da Morte con la incorporación de trece agentes en prácticas, de un total de 55 que desde este martes pasarán cerca de un año destinados en las diferentes zonas de La provincia de A Coruña. La subdelegada del Gobierno, María Rivas, presidió en Carballo el acto de bienvenida donde estuvo acompañada por el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña, Fernando Pedreira Lata, y el alcalde carballés, Evencio Ferrero.
En su intervención, Rivas destacó la importancia de esta incorporación, que supone “un reforzo importante para o territorio e unha mostra do compromiso real do Goberno de España coa seguridade, a cohesión territorial e a defensa do medio rural”. La subdelegada quiso remarcar que esta etapa será crucial en la vida de los nuevos agentes, tanto a nivel profesional como personal.
Carballo será uno de los municipios que más efectivos reciba en esta nueva fase formativa. De los 55 alumnos, trece han sido destinados a la compañía carballesa: ocho permanecerán en el propio cuartel de Carballo, tres en el de Corcubión, uno en A Laracha y otro en Camariñas. El resto se distribuirá entre las compañías de A Coruña (15), Ferrol (4), Santiago (12) y Noia (11), cubriendo así diferentes zonas de la provincia y reforzando la presencia del cuerpo en todo el territorio.
Rivas animó al nuevo alumnado a aprovechar al máximo esta oportunidad de formación práctica. “Hoxe iniciades unha etapa fundamental, non só para completar a vosa formación, senón tamén para comezar a vivir de primeira man o que significa o servizo público en Galicia, unha terra con carácter e con alma”, señaló. En ese sentido, insistió en que la experiencia será una puerta de entrada directa al trabajo real que desempeña la Guardia Civil en el día a día, en contacto con la ciudadanía y en múltiples escenarios.
La subdelegada hizo además hincapié en la variedad de funciones y contextos en los que los nuevos agentes deberán desarrollar su labor. “Cada actuación contará. Cada decisión terá un impacto. E cada xornada será unha oportunidade para crecer e contribuír ao ben común”, afirmó. También subrayó la diversidad geográfica de la provincia, lo que representa un reto y una oportunidad para formarse en múltiples entornos: “Chegades a unha provincia que combina costa e interior, zonas urbanas e un contorno rural cheo de vida”.
Carballo fue descrito por Rivas como “un municipio dinámico, con forte identidade propia, cruce de camiños e cabeceira de comarca, onde tradición e modernidade conviven”. El municipio, dijo, es un ejemplo del tipo de entorno en el que la labor de la Guardia Civil es esencial para la convivencia, la protección del entorno natural y la seguridad de la ciudadanía.
En su discurso, Rivas no solo se dirigió a los nuevos alumnos, sino también al personal veterano del cuerpo que ejercerá como tutores durante la fase práctica. “Vides aprender de profesionais que levan anos servindo con entrega, vocación e responsabilidade”, destacó, señalando el valor de ese conocimiento acumulado que ahora se transmitirá a la nueva generación de guardias civiles. Para concluir, la subdelegada reiteró la importancia de integrar no solo habilidades técnicas sino también los valores fundamentales del cuerpo.
“Observade, preguntade, escoitade e participade”, instó al alumnado, recordándoles que “aquí ides aprender non só procedementos, senón tamén o que significa formar parte dun corpo que simboliza o servizo público, a integridade e a lealdade”.