Los medicamentos agonistas del receptor GLP-1, como Ozempic (semaglutida), han revolucionado la pérdida de peso gracias a su notable eficacia en la reducción de la grasa corporal. Sin embargo, estudios y expertos alertan sobre una consecuencia menos deseada: la pérdida significativa de masa muscular que acompaña a esta rápida reducción de peso.
Aunque la pérdida de peso es crucial para la salud en casos de obesidad, diabetes tipo 2 e insuficiencia cardíaca, la composición de esa pérdida es de vital importancia. Investigaciones clínicas desarrolladas por expertos en obesidad de la Universidad de Virginia, han revelado que quienes usan semaglutida pueden experimentar una pérdida de masa muscular magra que supera el 10 por ciento en estudios de entre 68 y 72 semanas.
En algunos casos, hasta el 40 por ciento del peso total perdido se atribuye a la reducción de la masa corporal magra, la cual incluye el músculo. Esto representa una preocupación, ya que la pérdida muscular significativa puede tener implicaciones a largo plazo para la salud.
Un estudio reciente publicado en el Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism (JCEM) ha evidenciado que, si bien la semaglutida es efectiva para la pérdida de peso en adultos con sobrepeso u obesidad, su impacto en la composición corporal requiere especial atención. Los participantes del grupo de semaglutida perdieron una cantidad considerable de masa grasa, pero también experimentaron una reducción en la masa magra.
Es importante señalar que el porcentaje de masa grasa disminuyó y el porcentaje de masa magra (en relación con el peso corporal total) aumentó ligeramente, lo que sugiere una mejora en la composición corporal relativa.
No obstante, la pérdida absoluta de masa magra sigue siendo un factor clave para la salud funcional y metabólica a largo plazo. Los investigadores sugieren que este cambio en la composición corporal podría ser una de las razones por las que la semaglutida mejora la función física en personas con obesidad.
La masa muscular no es solo un componente estético; es un pilar fundamental de la salud general y bienestar funcional.
Cuando se pierde músculo de forma significativa, ya sea por el envejecimiento, la inactividad, ciertas enfermedades o, como hemos visto, por tratamientos para la pérdida de peso rápida, las consecuencias van mucho más allá de una simple disminución de la fuerza física.
La reducción de la masa muscular puede desencadenar una serie de problemas de salud que afectan la calidad de vida, la función metabólica y la resistencia a enfermedades. A continuación, exploramos las principales preocupaciones y riesgos que surgen cuando nuestro cuerpo pierde este tejido vital.
Ante este panorama, los profesionales de la salud enfatizan la importancia de adoptar medidas para preservar la masa muscular durante el tratamiento con Ozempic:
La eficacia de los medicamentos GLP-1 para combatir la obesidad y la diabetes es innegable. Sin embargo, la atención se centra ahora en optimizar su uso para asegurar que los pacientes no solo pierdan peso, sino que lo hagan de una manera que beneficie su salud a largo plazo, priorizando la preservación de su masa muscular.
Esta investigación continúa en la búsqueda de soluciones adicionales, incluyendo posibles medicamentos complementarios, que puedan contrarrestar la pérdida muscular.