Los residentes del edificio Rosalía de Castro, situado en la Rúa Cabello de Fisterra, han trasladado su malestar por la situación generada en el entorno inmediato del inmueble, debido a los coches que aparcan en la propia acera. Según indican, la zona contaba anteriormente con unos parterres ubicados en suelo municipal que separaban la calzada de la acera frente al edificio. Estos parterres fueron retirados por el Concello tras detectarse filtraciones que afectaban a los garajes y debían ser sustituidos por bancos o jardineras, pero la actuación nunca llegó a ejecutarse.

La ausencia de este mobiliario ha convertido el espacio en un aparcamiento improvisado que, según denuncian los vecinos, se ha agravado especialmente durante los meses de verano. Los vehículos estacionan junto a la fachada del edificio, lo que, además de invadir la privacidad de los residentes, provoca ruidos, contaminación y un riesgo añadido para peatones. La circulación de coches sobre la acera genera especial preocupación por la seguridad de niños y personas mayores. Los vecinos afirman que la problemática se arrastra desde el año pasado y que, aunque han mantenido conversaciones con el Concello, todavía no se han concretado soluciones.