9º-19º
viernes | 19 abril | 2024
La Casa do Maior de Agualada entrará en funcionamiento tan pronto como la Consellería de Política Social seleccione a las cinco personas con dependencia de grado 1 y 2 que serán atendidas en las remozadas instalaciones por una cuidadora de la cooperativa Monte Branco. Mientras tanto, el Concello de Coristanco también aprovechará para efectuar una pequeña intervención en el exterior del edificio.
Este modelo que favorece un envejecimiento activo en el que los mayores siguen vinculados a su entorno, al tiempo que se potencia la economía social, está en auge en la Costa da Morte, en donde muy pronto habrá un total de once centros operativos.
Uno de los tres que están a punto de abrir es el situado en las antiguas escuelas de Agualada, edificio que también funciona como local social de la parroquia. La Casa do Maior ocupa concretamente el ala izquierda de la planta baja, la más próxima a las instalaciones de la firma Agrícola Matova. El acceso se hará por la parte trasera del inmueble.
La Cooperativa Monte Branco encargada de gestionar el servicio recibió de la Xunta una ayuda de 15.000 euros para acondicionar y equipar los espacios interiores, que han sufrido una radical transformación.
La nueva distribución incluye cocina-comedor, una amplia sala de estar y dos baños adaptados en los que es posible ducharse. Además, cuenta con ayudas técnicas como grúas para mover a personas en silla de ruedas.
La atención para los cinco usuarios remitidos por Política Social será gratuita, salvo que hagan uso del comedor, en cuyo caso abonarán 5 euros por día.
