Los vendedores que quieran comercializar sus productos en las ferias de la Praza do Concello y en el mercado de A Milagrosa que se celebrarán periódicamente en Carballo durante 2023 pagarán lo mismo que en los últimos doce años. Según la información facilitada por la concejalía de Feiras e Mercados este fin de semana a los titulares de los puestos de venta ambulante, durante el próximo año pagarán sobre 0,63 euros el metro cuadrado, la misma tasa que está vigente desde 2011 que se mantiene pese a la actualización de la ordenanza reguladora aprobada este año.
El plazo para solicitar la autorización de la venta ambulante para el próximo año abrirá este jueves y según la nueva ordenanza, la autorización tendrá una vigencia de cinco años y la tasa se podrá pagar anualmente. Dependiendo de la modalidad de venta ambulante y tipo de mercado el Concello podrá autorizar la venta de artículos de textil, artesanía, marroquinería, calzado, confección, droguería, frutas, verduras, plantas o cualquier otro producto alimenticio que cumpla con las condiciones fijadas por la normativa vigente.
También hay algunas novedades que afectan a pequeños productores que venden en las ferias sus excedentes. En este caso, los interesados deben formalizar su inscripción en el censo municipal de vendedores no permanentes indicando qué productos van a vender y el lugar de origen de los mismos, así como la superficie que van a ocupar.
La inscripción será anual, pero los pagos se realizarán cada tres meses, según el número de ferias a las que hayan asistido en el trimestre anterior. El plazo para darse de alta en el censo estará abierto durante todo el mes de diciembre. En estos casos los puestos serán de 2x1 metro y en el caso de precisar más espacio, deberán hacerlo constar en la solicitud. Los pequeños productores no tendrán asignado un puesto fijo en la plaza, aunque tendrán preferencia para ocupar el mismo lugar si asisten al mercado de forma regular. No obstante, si a partir de las 9.30 horas el lugar estuviera sin ocupar por la persona habitual, el mismo se entenderá como libre y podrá ser ocupado por otro pequeño vendedor de forma ocasional en estricto orden de llegada.
Deberán mantener unas mínimas condiciones de salubridad e higiene y separación del suelo de sus productos. Una vez retirado su puesto deberán dejar perfectamente limpio de residuos.