Las plantas acuícolas de A Ostreira, del Grupo Campo, recibirán en 2025 una inversión para dotarlas de mejores capacidades productivas.
La infraestructura de Rons-O Grove (Pontevedra) recibirá una inversión de un millón de euros para incrementar su capacidad productiva, mientras que la de Barizo-Malpica, tendrá mejoras por medio millón.
En la planta malpicana, A Ostreira renovará las cinco piscinas exteriores de producción de fitoplancton, así como la reparación de canalizaciones y captaciones de agua de mar. Además, se adquirirá un nuevo equipo de luz ultravioleta para la mejora de la purificación del proceso de cría.
Por lo que respecta a las instalaciones de O Grove, verán duplicada su capacidad de producción de fitoplancton para la alimentación de semillas con distintas actuaciones.
Así, se construirán tres nuevas piscinas que permitirán alcanzar una capacidad total de 460 metros cúbicos de agua de mar, captada a través de una nueva canalización soterrada en la costa.
La instalación contará con un abastecimiento eléctrico sostenible gracias a la reubicación del parque fotovoltaico, que pasará del suelo a las cubiertas de las naves.
Las obras de O Grove se iniciarán en cuanto se conceda la licencia municipal, un trámite que completará un complejo proceso de autorizaciones iniciado en 2018 con la administración central y autonómica, y culminado, en su fase de proyecto, en 2025, con la autorización de concesión de actividad por 50 años para el criadero de moluscos en terrenos de dominio público marítimo-terrestre.
La actividad de A Ostreira consiste en el desove de almejas y ostras autóctonas, desde la selección de los reproductores hasta la posterior comercialización de los juveniles y adultos.
Anualmente, produce 150 millones de unidades de estos moluscos y es la única empresa gallega que gestiona y controla todo el ciclo de producción de los bivalvos.
Con las nuevas inversiones, el objetivo es duplicar la producción de semillas para abastecer a cofradías y parques.
A Ostreira, empresa perteneciente al Grupo Campo, contribuye directamente a la repoblación de bancos marisqueros con su intensa actividad productiva.
La pérdida de calidad de las aguas de las rías de Galicia, unida a una alta presión extractiva de molusco en el medio natural, ha causado una mortandad en almejas y ostras preocupante para el marisqueo, lo que ha agotado gradualmente estos recursos.
La producción de millones de semillas en talla de siembra supone una garantía en la preservación de la cadena mar-industria y el sustento de miles de empleos en la región.
La empresa dispone también de un sistema flotante de cultivo en la ría de Arousa, compuestos por diez bateas.
Las fases iniciales del cultivo se desarrollan en Barizo y Meloxo, mientras en las bateas se lleva a cabo el preengorde y engorde de los juveniles.