Domingo festivo en toda la Costa da Morte, con dos citas obligadas: la Festa do Bosque de Carballo y la Festa da Carballeira de Baio (Zas). En plena ola de calor, con los termómetros superando los 30 grados en los dos lugares,  estos enclaves se convirtieron durante la jornada en refugios climáticos para combatir las altas temperaturas. Refrescarse en las orillas del Anllóns, en la capital de Bergantiños, o en el río Grande, en la localidad baiesa, era tarea obligada en este día para poder disfrutar de la fiesta. 

Asegurarse una buena sombra para la ingesta de comida y bebida, los bailoteos y los juegos era la mejor opción para jóvenes y adultos, puesto que el sol apretó durante toda la jornada. Aún así, las altas temperaturas no fueron impedimento para disfrutar de las fiestas por todo lo alto. 

La Festa do Bosque puso el broche de oro a las celebraciones del San Xoán. Tras diez días continuados de fiesta, ayer tocaba a su fin con la tradicional comida campestre a orillas del Anllóns. Un encuentro intergeneracional, familias enteras o grupos de amigos para disfrutar del día. La música de Rocío Pérez y Martín Carrión animó la sesión vermú y fue abriendo boca para la comida. Y también para la bebida. 
Churrasco, tortillas, ensaladas o empanadas estaban entre los platos principales, aunque la oferta era mucho más amplia en cada grupo. Tras la ingesta, comenzó el concurso de sobremesas patrocinado por Confitería San Luís, donde se exhibieron diversas creaciones.

Bajada de barcos de papel

Los juegos populares fueron otro de los atractivos de la jornada, con el tiro da corda como atracción principal, donde participaron niños y adultos. Aún así, el momento álgido de la jornada llegó con el Campeonato Mundial de baixada de augas doces de barcos de papel, que ayer cumplía su edición número 105. Los barquillos de papel empezaron a bajar por el río, algunos verdaderas obras de arte preparadas para la ocasión, ante las atentas miradas de los participantes, que iban siguiendo su recorrido con la vista. Dj David fue el encargado de conducir la fiesta, que pone el punto final al San Xoán de Carballo.

Y mientras en la capital de Begantiños disfrutaban de la Festa do Bosque en Baio hacían lo propio con Carballeira, en un paraje singular, también a orillas del río. Los diferentes grupos se repartían por todo el enclave natural para dar buena cuenta de la comida, la bebida y la música que animó la jornada. A los que les tocaba encargarse de la comida, afanados en las numerosas parrillas, parecía que el calor no les importaba demasiado porque era día de fiesta y había que disfrutar. La sesión vermú estuvo animada por dj Expósito, el dúo La Mecánica y el dúo Son 2, que volverían en la verbena. Y por la tarde, sonaba la charanga Noroeste.