La corporación cabanesa acordó en el pleno ordinario celebrado el pasado lunes rendir un homenaje a los exalcaldes de la etapa democrática dándole su nombre a distintos edificios municipales, como muestra de reconocimiento a su legado. El acuerdo se tomó con el voto en contra del BNG.

De esta forma, el polideportivo de A Carballa pasará a denominarse Pavillón Municipal Manuel Fariña en recuerdo del médico y político que ejerció como regidor del municipio durante 17 años, entre 1979 y 1995 y, posteriormente, entre 1999 y su fallecimiento en el año 2000. Durante su mandato se impulsaron avances significativos en todas las parroquias del municipio.

El centro de salud de A Carballa llevará en lo sucesivo el nombre de Manuel Barral Castro, alcalde de Cabana entre 1995 y 1999. Médico de profesión, ejerció como tal cuatro años antes de ser elegido regidor. 

Su gestión destacó por la puesta en valor del patrimonio histórico y la ejecución de importantes infraestructuras como la senda peatonal del Anllóns, la piscina municipal, el centro de mayores o el propio centro sanitario.

Por último, el local social de Cundíns pasará a llevar el nombre de Enrique Díaz Varela, alcalde natural de la citada parroquia que asumió el cargo a la muerte de Manuel Fariña, ejerciéndolo entre 2000 y 2003. Concejal durante más de tres décadas, falleció hace cerca de seis años víctima de una grave enfermedad y es recordado por su talante dialogante y su cercanía.

El alcalde, José Muíño, explicó que “con esta medida buscamos recoñecer e poñer en valor o traballo político e o valor humano dos nosos anteriores alcaldes. Todos eles contribuiron a dar forma á nosa identidade como concello a través do seu compromiso e dedicación. Conservar a memoria histórica é fundamental para fortalecer a identidade cabanesa. Saber de onde vimos é o único xeito de saber onde estamos e cara a onde queremos ir”.

Tatiana Rellán, portavoz del BNG, recordó que fue su grupo el que llevó a pleno una moción para homenajear a Manuel Fariña y tildó la iniciativa del PP de  “contrapoposta que non trata de homenaxear a nadie, senón de diluir a figura de Manuel Fariña”.