Menos mal que aquí somos muy familiares

Menos mal que aquí somos muy familiares
Una joven camina frente al escaparate de una inmobiliaria / Patricia G. Fraga

Los gallegos, por lo general, somos muy familiares. De comer juntos el domingo y reunirnos bajo el mismo techo con cualquier pretexto. Y menos mal, porque lo de la emancipación por estos lares está complicado. Según un estudio recién publicado, casi ocho de cada diez menores de treinta años viven con sus padres. Al final nos van a vender la falta de oportunidades laborales como un impulso a la conciliación.

Menos mal que aquí somos muy familiares

Te puede interesar