9º-14º
viernes | 26 abril | 2024
Los claroscuros de la meteorología depararon que ayer los mercados de Paiosaco, Cee y Baio registrasen menor actividad. La jornada matinal de nubes y claros se dejaba notar desde primeras horas, con cielo encapotado, algo de orballo e incluso lluvia, entrelazando alguna ráfaga de sol.
Paiosaco evidenció bajas de comerciantes y cosecheros. Una vez más el tirón de este recinto se centró sobre todo en el sector de la huerta de la comarca, fruteros, alimentación, textil y calzado.
La demanda de la patata nueva de cosecha autóctona es uno de los reclamos de especial atractivo y el tubérculo de la zona va desplazando a pasos agigantados a la de la anterior cosecha.
Las patatas nuevas de Coristanco, A Laracha, Carballo, Malpica y Arteixo cotizaron desde 1.50 a 2 euros el kilo, y las de la competencia, las de Cartagena, a 1.25 euros el kilo, frente a las de la anterior cosecha, que se despacharon entre 0.50 y 0.80 euros el kilo. Entre las novedades de huerta destacaron los guisantes en vaina, entre 3 y 4 euros el kilo, y de esta familia, los tirabeques cotizaron a 3 euros el kilo, y las fresas de la comarca, a 3 euros el kilo.
Los codiciados pimientos de Herbón-Padrón “volaron” en el ferial. Algún comerciantes aportó media docena de bolsas de 400 gramos, euros que se cotizaban a 6 euros, pero se terminaron en pocos minutos. De las verduras, nabizas, grelos, acelgas, berza gallega, entre 1 y 1.50 euros el manojo.
Este importante abanico del mercado también ofertaba variedad de tomates, entre 2 y 5 euros; pimiento morrón rojo, amarillo y verde, desde 1.50 euros.
Cobró nuevamente la atención el mercado de quesos de queserías de la zona, entre 8.5 euros el kilo, y queserías artesanas de Cerceda, Soandres, Tordoia, Carballo o Arteixo, con piezas desde 5 euros.
El mercado de planta mantiene atención para los profesionales de siembra, sobre todo los padroneses, que ofertaban lotes de planta de pimientos de Herbón, y otras variedades de morrón, cebollino, tomate, como producción destinada al autoconsumo de los lugareños.
El ferial terminó antes de lo habitual.
El mercado ferial de la pintoresca villa de Cee también languideció ayer, y no sobrepasó de 70 puestos ambulantes.
En la misma dinámica, el comercio local tampoco ofrecía el día brillante, y la mañana tampoco invitaba a la disfrute del terraceo de la una amplia oferta de la hostelería.
