La suerte pasó de largo en la comarca en la Lotería de Navidad del pasado 22 de diciembre, y ahora las esperanzas están depositadas en el sorteo del Niño que se celebra este viernes.
Ayer, coincidiendo con el mercado semanal en Carballo, hubo mucho movimiento en las administraciones locales, con los más rezagados intentando conseguir algún décimo “de los que tocan”, como repetían algunos.
María Eirís, de la Lotería Alexandra, asegura que “fue una mañana de locos”, debido a la gran cantidad de gente que hubo. “Tuvimos tal cantidad de gente que ni pudimos cerrar al mediodía”, indicó.