Lo sabíamos…

Las terrazas que ocupan la calzada han venido para quedarse. Lo sospechábamos, pero nos negábamos a creer que se llegase a tal despropósito. A ver, que se permitieran durante la pandemia, cuando estaba prohibido acceder al interior de los locales, tiene un pase y se entiende, que todos tenemos derecho a ganarnos la vida, pero ¿y ahora? ¿Ahora también? ¿Por qué? ¿Pagan impuesto de circulación? Nosotros sí y no podemos aparcar. ¿Pagan ORA? Nosotros sí y ni con esas tenemos un sitio reservado 24 horas al día. Dice el Sr. Cañete que la acera debe ser para los peatones; en eso estamos de acuerdo. ¿Y la calzada?, ¿para quién debe ser?, ¿para los automóviles? Noooo…, ¡para las terrazas! Es mucho más lógico, sí. Alegan que pagan las tasas -solo faltaría- y quieren que el permiso para ponerlas aparezca en las Ordenanzas Municipales como dios manda. Nosotros seríamos más partidarios de que, el que quiera tener un local con terraza, lo haga donde haya el espacio lógico para ponerla, no que se prive a unos ciudadanos de unos derechos para contentar a otros. Mal, muy mal. Contentos nos tienen...